La comunidad parroquial ofrece la posibilidad de acercarse a Dios, de conocerle y de aprender a amarle. El primer objetivo de la esta parroquia es ayudar a sus miembros a alcanzar la santidad, creciendo en el amor a un Dios que nos ama infinitamente. Para ello ofrece una liturgia cuidada y fiel a las enseñanzas de la Iglesia, una catequesis amplia dirigida a niños, adolescentes, jóvenes y adultos, unas actividades formativas, servicios de orientación familiar y la posibilidad de ser ayudado en las necesidades materiales y espirituales.